
Para muestra, os podéis bajar el disco completo aquí.
Ah! y cómo no, son amigos míos.
La noche entre los días 15 y 16 de octubre de 1983 desaparecieron de la localidad donde residían los jóvenes tolosarras Joxean Lasa y Joxi Zabala. Se ponía así en funcionamiento la trama que desde el Gobierno del PSOE organizaron, con la implicación de los aparatos del Estado y el consentimiento del Gobierno francés, para combatir el independentismo vasco, si bien la justificarían enmarcándola en la «lucha contra el terrorismo». Secuestros y atentados indiscriminados se sucederían durante varios años, con un saldo de 27 muertos y numerosos heridos. Era la defensa del Estado «desde las cloacas», como la denominó el presidente del Gobierno español en aquellos años.
Los GAL fueron el paradigma del terrorismo de estado, y la desaparición de Lasa y Zabala lo fue de su actuación, toda vez que conllevó el secuestro, el tormento de la tortura y la muerte. Todo ello al amparo de la impunidad. Veinticinco años después, sin embargo, el conflicto que enfrenta a Euskal Herria y a los dos estados que la administran sigue en los mismos parámetros de confrontación. La llamada lucha contra el terrorismo lo sigue siendo contra el independentismo vasco, con el mismo intento de anular a ese sector con decisiones impropias de un Estado de Derecho, pero justificadas por el sello judicial; con el mismo partido desde el que se organizaron los GAL gobernando en Madrid; y con el mismo partido cuya Policía secuestró los féretros de los dos jóvenes en su entierro y agredió a los familiares y demás asistentes al acto de homenaje a la cabeza del Gobierno de Lakua.
Se cumplen 25 años de la desaparición de dos jóvenes vascos que, según se sabría doce años después, fueron torturados indescriptiblemente y muertos por quienes tenían encomendada la misión de respetar y hacer respetar los derechos de los ciudadanos y que, a pesar de que algunos de ellos fueron juzgados 17 años después en uno de los escasísimos casos de terrorismo de estado que llegaron a los tribunales, hoy se encuentran en libertad. Dos desaparecidos no en el seno de una «dictadura sudamericana», sino en un estado europeo que se reivindica democrático. El mismo que sigue brindando impunidad y evitando la depuración de responsabilidades.
Esta frase, hecha por Michael Douglas en Wall Street (1987) podría resumir lo que muchos tienen en la cabeza. Representa el espíritu del capitalismo del "dinero a cualquier precio", aunque matemos al animal que nos da de comer.
La historia se resume como sigue: debido a la contaminación y posterior explosión de activos inmobiliarios en los USA (una burbuja especulativa sobre su valor futuro), ha provocado un efecto dominó por el cual han ido cayendo grandes bancos comerciales, de inversión, aseguradoras, y al final, los estados y bancos centrales han tenido que intervenir para detener la situación que se ha generado en este sistema tan interdependiente. El circulo vicioso de los mercados financieros, se ha acabado comiendo a la economía real.
Todas las medidas no han funcionado para contener el miedo y la desconfianza. Los grandes predicadores de la desregulación, de la no-intervención en los mercados, han tenido que tragarse sus ideas, su "filosofía", dejando sus dogmas a un lado tras comprobar los efectos del capitalismo y de su naturaleza crematística.
El mundo patas arriba, donde los liberales tienen que salir en ayuda del gran patrón, nacionalizando o vendiendo a precio de saldo bancos a otros, haciendo una vez mas realidad, la frase "socializar las perdidas, privatizar los beneficios". Las circunstancias les han obligado a ello, pero luego retomaran sus "ideales" cuando la confianza haya vuelto. Entonces el sistema volverá al que era o siempre ha sido, con o sin maquillaje.
La concentración de bancos y empresas es cada vez más grande, y como en toda situación, hay ganadores y perdedores. Entre los ganadores, los grandes entre los más grandes, que acabarán comiendo a los que tengan problemas (aunque todos ellos hayan contribuido a crear y posteriormente destruir la burbuja), y entre los perdedores, algún que otro banco, y por supuesto, los que siempre están en la amplia parte baja de la pirámide, y que van a tener que pagar por duplicado: primero con sus recursos, impuestos, etc.. se pagaran los planes de "rescate", y segundo cuando los bancos empiecen a reclamar sus deudas.
Con este sistema, al final, aquellos que tomaron riesgos, son premiados por partida doble: primero especulan y se enriquecen por la situación, y luego y a pesar de ser los primeros actores desencadenantes de la crisis, se les premia por ello ayudándoles a que la rueda siga en movimiento y no llegue el colapso y posterior caos.
Indecente (se me ocurren palabras peores) resulta pensar, que debido a una poca regulación y una época de alegría financiera, consumista y especuladora, miles de personas empeorarán, muchas deberán dejar sus casas, y cada vez más nos damos cuenta, de que nuestro día a día, nuestras formas de hacer, vienen totalmente decididas desde arriba, que consideraran cuando podemos comer, cuando comprar y cuando quejarnos, ¿o no?
Señala Walden Bello que "el desplome de Wall Street no sólo se debe a la codicia y a la falta de regulación estatal de un sector hiperactivo. El colapso de Wall Street hunde sus raíces en la crisis de sobreproducción que ha sido la plaga del capitalismo global desde mediados de los 70". Decía Rosa Luxemburgo que el capitalismo necesita de expansión continua, como hemos visto con el fenómeno globalizador y la rápida integración de las zonas semicapitalistas, no-capitalistas y precapitalistas a la economía global de mercado. Asi, las tasas de beneficio en los países capitalistas se mantendrían.
Por ello, los deseos de colocar las teorías marxistas como ideas caducas, trasnochadas y para nostálgicos, han errado (siempre lo hemos sabido), y vemos como muchas de las predicciones de Karl Marx, vistas a largo plazo, han resultado del todo acertadas.
Pues resulta que en este capitalismo libre y desregulado, grandes bancos, se dedican a jugar a una especie de casino jugando a la ingeniería financiera, contabilidad creativa con productos innovadores. Apuestan, ganan, pero al final, pierden y a partir de ahí, vemos el sistema cae, se derrumba. Estamos en un juego de suma cero, donde unos pierden porque otros ganan, llevando a un proceso de concentración cada vez mayor. Parece ser que cuando se les deja solos, se desbocan, y no tienen la memoria suficiente para acordarse de las sucesivas (necesarias) crisis en el capitalismo. La pregunta es: ¿cómo es posible que un sistema que se creía claramente consolidado, que tenia sus bases bien asentadas, entre en barrena en tan poco tiempo?
Puede ser que por ahora, llegamos a un punto intermedio del capitalismo, donde las economías planificadas pasan a albergar aspectos de economía capitalista de mercado, y estas ultimas, añaden aspectos "socialistas o intervencionistas" a sus economías, para equilibrar la fiesta? En resumen, a una economía keynesiana pero que perpetuará el capitalismo y solamente limara sus efectos, si hay suerte.
Lamentablemente, la capacidad de adaptación del capitalismo es tal, que lograra sobrevivir a esta perversión creada por el mismo sistema.
Para terminar, hay varias preguntas mas:
¿Es cierta la idea del declive como actor del estado-nación en la globalización, en la cesión de poder a "la mano invisible"?
¿Cuánto durará esta recesión y por donde vendrá la recuperación?
¿Necesitará la economía de los USA otra burbuja (después de la de Internet, la financiera y la inmobiliaria) para salir de esta crisis? Muchos apuntan al sector industrial-armamentístico.¿Será el capitulo todavía por escribir de La doctrina del shock, de Naomi Klein?
Deberíamos empezar por replantearnos términos como crecimiento, expansión, producción y centrarnos en otros como decrecimiento, sostenibilidad y equilibrio, conceptos y cambios que, por el momento no vendrán de los países desarrollados.
Per què mengem aquesta cosa i no una altra? D’on surt el que mengem? Què és i com funciona el sistema agroalimentari? Aquestes són algunes de les preguntes que mai ens fem i que tenen una gran importància dins la estructura del sistema capitalista. Per què? Doncs molt fàcil: si tenim en compte que el sistema capitalista es basa en el consum i qui més qui menys, a la nostra zona, tots i totes mengem tres cops al dia com a mínim, podem deduir fàcilment que el sistema agroalimentari es un pilar bàsic per sustentar el capitalisme. Només hem de mirar les dades i comprovar que la empresa que va obtenir més beneficis l’any passat va ser Wall-Mart Stores. Perquè ens entenguem: un Mercadona (que a partir d’ara anomenarem Metadona per adequar-se més a la adicció que provoca) però nord-americà.
Amb la intenció de criticar el sistema de producció, distribució i consum d’aliments que impera, hem decidit participar en aquest blog, encara que no estem d’acord amb allò de poperos i de Gabilondo ("la culpa fue del chachaChaos"), amb un seguit d’articles. En properes entrades explicarem la historia del sistema agroalimentari, el perquè dels supermercats, el consum crític i un munt de temes més. Ja veureu, ens menjarem fins i tot el conill!